Tuesday, May 01, 2007

1º DE MAYO: DÍA DEL TRABAJADOR
(mi cumpleaños)


Lo que me regalaron: un pen drive para transportar info, un monedero rojo, un buzo de plush verde, una billetera rosa con vaquitas de san antonio, un cuaderno de minie y los tres volúmenes del tomo 1 de El capital (¿qué voy a hacer yo con semejante inmensidad de páginas, de economía, filosofía, política?). Me reí mucho porque justo en mi fiesta de cumple conté algo que la verdad me deja bastante mal parada, como un poco mezquina y, digamos, bien cerca de das kapital, pero bue, no me importa, lo voy a contar igual otra vez acá: cuando estuve en Río dormí en hostels y compartí habitaciones con gente que no conocía y sinceramente eso me hacía sentir un poco vulnerable y no sólo yo era vulnerable, también mis cosas (todo todo me lo podían robar) y entonces el primer día llegamos a la habitación y había otra dos chicas que ya dormían y yo me puse el pijama y me metí en la cama (subí a la cama porque eran cuchetas), pero cuando estaba acostada pensé en mi jean nuevo de akiabara que me había costado como 200 pesos y entonces bajé muy silenciosamente, me traje el jean y lo puse abajo de la almohada (después juro que me acostumbré a mi vulnerabilidad y a la de mis cosas, me relajé y entonces, digamos, dormí sola y tranquila). Sí, sí, sí, era cantado, estoy lejos de Das Kapital (para qué me lo regalan, entonces) y no sólo de eso, a veces quiero estar a años luz de todos los libros del mundo y convertirme en una gran iletrada, como por ejemplo hoy, que fue mi cumple y que me tomé el día (nací un primero de mayo y eso me condenó a ser una chica muuuy trabajadora) para hacer algo que me encanta: ver series yanquis por la warner, y en eso estuve como cinco horas, en frente del televisor, pero igual mis ganas encontraron un límite: los policías neoyorquinos de third watch y entonces cambié a billy eliot, la peli inglesa, y lo escuché a billy decir que cuando él bailaba como que desaparecía y que sentía por dentro una especie de electricidad, un sacudón, digamos, y eso qué envidia me dio, a mí cuando leo no me pasa eso, contadas veces me pasa y ahora lo que sí me pasa es que me agoté otra vez porque estuve leyendo, estuve pensando en todo lo que tengo que hacer, en todos mis trabajos pendientes y no cumplí con la promesa ni con mis ganas de no hacer nada más que mirar tele y me empiezo a acordar que mañana empieza la semana devuelta y el trabajo se me vuelve pesado, una carga difícil de sobrellevar todos los días de toda mi vida.

6 comments:

nv said...

tu anécdota es legítima,amie, solo vos sabías las horas-clase y las horas-sacrificio que te había costado el maldito jean.
todavía falta nuestro regalito, así que no va a ser tan caro para evitarte problemas futuros de consciencia, jaj
bsote enorme

Mer said...

Hubo otra cosa te alejó bastante del das kapital queridita, y fue no ser capás de llamar a tu propia hermana para convidarle un poco de jugo de frutas. Maldita perra.

Anonymous said...

Ay, Lau, cómo te entiendo... pensar que vamos a tener que trabajar por el resto de la vida hasta que ¡¡nos jubilemos!!
jajaa, el secreto está en buscar trabajos disfrutables, creo.
Muy ricos los daikiris!!

besos!

Y sigo pensando que si la mina que dormía abajo te robaba el jean se iba a poder hacer un lindo chaleco.. porque ponérselo, ni a palos! jaja

nv said...

sí, coincido con vos y con Vir: para mí, si existe el paraíso se da con el tiempo: la jubilación.
por ahora, estoy contando los días para entrar en licencia porque con la panza "lo pesado" del trabajo se vuelve literal...
otra cosa, voy a linkear el blog de tu hermi: muy bueno, ¿no viste q siempre estoy pidiendo q me recomienden pelis? otra cosa q te encanutaste bajo la almohada, you-selfish!!
mentiraaaaaaaaaaaaa mon amie, sabés que lo mío es joda nada ++, si de alguien no pienso eso es de vos

tqm ;*

Anonymous said...

lau, te entiendo, te entiendo con lo del jean, no sientas culpas (al fin de cuentas, como dice la propaganda de visa, vivimos en este mundo) y me sumo, no sabés cuanto, a esos deseos de a ratos de ser una iletrada que no sepa quien corno es Proust... (con que se come?)... con respecto a lo del trabajo, que se yo, capaz que cuando tengamos nuestra escuela propia es mas divertido, no sé, yo siempre soñé con ser escritora y hace meses que solo pienso en los reflexivos y el futuro (y en alguna gente, pero eso es otro tema, jajaja)

Clara O. said...

Ay, chicas, buenísimo que me entiendan. Lo del pantalón es una anécdota muy graciosa (y si no me río yo de yo estoy en el horno), pero lo del trabajo es todo todo un problema- casi irresoluble diría. Por eso me encantan los Manuscritos de Marx y aunque esté muy lejos de todo (de entender, incluso ja!) el sólo hecho de leer (de pasar mis ojos por esas espesas letras)la crítica del modo de trabajo al que tan habituados estamos me reconforta un poco. Si nos sentimos taaan mal por algo es, después de todo. Igual, no siempre leer me reconforta, como sabrán. Qué quejosa estoy!
A noelí le digo que le permito linkear el blog de mi hnita! Y que tu panza, por más pesada que sea, es realmente hermosa!y tb tqm!
A mi hnita le digo que bien lejos quedaste de tu "schwester" cuando te fuiste a dormir sin saludarme por mi cumple.
A vir, que gracias por las vacaciones buenísimas que pasamos!
A Alelí que se ponga las pilas y empiece de una vez por todas a dar a conocer lo que escribe. Porfi, abrite un blog por lo menos!
Un besote a todas!