Friday, August 31, 2012



Convencer (intentarlo) es un acto de amor

El 18 de mayo de 1972, el día de Artigas, los tupamaros atacan la casa del comandante en jefe del ejército uruguayo, General Gravina, y matan a cuatro soldados que estaban de guardia: Saúl Correa Díaz, Osiris Núñez Silva, Gaudencio Núñez Santiago y Ramón Jesús Ferreira Escobar. Todavía hoy los antiguos miembros de la organización discuten sobre ese episodio. Jorge Zabalza, tupamaro “histórico”, cuenta:

“Con Raúl Sendic y Julio Marenales compartimos cuarteles y, cuando el personal de tropa, que tenía prohibido hablar con los rehenes, nos trataba de asesinos por lo de la estancia Espartaco o por la muerte de sus cuatro camaradas, discutíamos hasta convencerlos de que lo ocurrido frente a la casa de Gravina fue un acto de guerra, un combate, y no un asesinato a mansalva”.

(el subrayado es mío)

Fuente: José Rilla, La actualidad del pasado. Usos de la historia en la política de los partidos de Uruguay (1942-1972). Buenos Aires, Sudamericana, 2008.

Thursday, August 30, 2012


Estados Desunidos


Soy  la Policía de mi estado
mental, dibujo en un cuaderno
el zigzag de mi ánimo.
En el cielo o en la entraña del mar
la rayita se sumerge translúcida y azul
lo desafía : Moisés es el otro
gran policía, de la ley que divide las aguas en dos.
Medusas de trenzas tirantes
se sacuden en mi cabeza, se dirigen
a la prisión que él fundó en el mar.
Hay una cueva bajo la arena
en la que ellas se juntan a comer algas
que las ponen tontas, las encandila
la oscuridad y aprenden a sobrellevar
el lugar del sexo malo y la caída.
Esas Medusas duras son el desamor.
Si salieran de mi cabeza
mi pelo perdería brillo, la casa quedaría
destartalada, dejaría de ser
la mujer briosa y suave
que teje escarpines de bebé
dice “bibelot” sin “t”
y prepara manjares de duraznos.

El dolor comunal de las Medusas
me ataría a una cama que, capullo carnívoro,
se cerraría sobre mi boca. ¡Ay, si se escaparan